miércoles, 23 de octubre de 2013

II Congreso Europeo de Resiliencia

Después de mucho tiempo sin retomar este blog debido a condicionantes externos que demandaban mucho de mi tiempo, hoy quiero volver a escribir esta nueva entrada. La motivación es poder trasladar la grata vivencia del II Congreso Europeo de Resiliencia celebrado recientemente en Bilbao.

Durante unos días hemos tenido la oportunidad de escuchar interesantes ponencias de las figuras más representativas del panorama de la resiliencia actual, comenzando con las profundas reflexiones de Stefan Vanistendael y continuando con aportaciones tan relevantes como la de Jorge Barudi, Jean Pourtoise, Eugenio Saavedra y una entrevista –que por problemas de agenda tuvo que ser grabada– con el propio Boris Cyrulnik. También pudimos contar con el saber compartido de Anna Forés, Jordi Grané y Rosa Mª Ollé y la perspectiva aplicada de Oscar Pérez–Muga. Además cabe destacar la amplitud de mirada hacia la resiliencia desde disciplinas como la Neurociencia, a cargo de Javier de Felipe o la Ecología, por Joseba Azkarraga.

Igualmente es importante resaltar la cantidad y calidad de las comunicaciones y posters recogiendo experiencias de investigación y desarrollo de programas de resiliencia en múltiples ámbitos. Ha sido muy gratificante comprobar cómo este tema de la resiliencia está creciendo y dando frutos tan diversos, prácticos e interesantes.

A parte de haber tenido la gran oportunidad de colaborar con el grupo que se encargó de la organización y el comité científico, mi participación presencial en el congreso se articuló a través de un taller titulado “Holismo y resiliencia: de la teoría a la práctica”. Particularmente el formato taller me parece muy adecuado para exponer ideas que en principio pueden parecer complejas. La cercanía, la interacción y el saber grupal sin duda consiguen crear un terreno abonado para el aprendizaje y también para el disfrute compartido.

Para mí supuso una oportunidad singular de poder dar a conocer mi perspectiva y líneas de trabajo con un público experto. Entre los participantes tuve el honor de poder contar con  la presencia y el apoyo de autores como Stefan Vanistendael, Jorge Barudi, Anna Forés y Jordi Grané –que tanto han contribuido a dar a conocer y extender este marco de la resiliencia–, así como muchas personas que están desarrollando importantes proyectos e iniciativas en este campo. Con ellas tuve la oportunidad de explorar conceptos tan profundos como el del holismo –tal como ya postuló Smuts en 1926– y su aplicación posterior a distintas disciplinas, para acabar aterrizando en la resiliencia holística. Pude explicar que esta perspectiva la desarrollé inicialmente como fundamentación teórica y de investigación para la tesis doctoral y cómo en la actualidad continúo generando nuevos instrumentos y aplicaciones, principalmente para el campo de la Educación y más recientemente Enfermería. Me resultó especialmente motivador comprobar el nivel de implicación e incorporación de los principios básicos de este marco que demostraron en las distintas dinámicas propuestas. Realmente resultó un proceso muy fluido, como el propio concepto de resiliencia desde el modelo holístico y creo que los allí presentes pudimos captar algo de esa magia que genera la resiliencia y nos vincula a todos y a todo lo que nos rodea. Por mi parte todavía siento el empuje colectivo que me motiva a seguir trabajando y espero que, para el próximo año, publicando en esta línea de la resiliencia holística. Gracias de corazón a todos los participantes del taller y del congreso en general.


Finalmente, también me gustaría agradecer a todos los organismos, que en los momentos que corren, han contribuido con el patrocinio y a las personas que con su ilusión y trabajo han hecho posible que se generara este evento. De manera especial me gustaría reconocer el gran empuje y esfuerzo del Presidente de este II Congreso Europeo de Resiliencia, José Mª Madariaga, quien propuso el maravilloso marco de la ciudad de Bilbao para este evento. Sin duda alguna, también el bello entorno y la amabilidad de sus gentes han contribuido a que el profundo paradigma de la Resiliencia pudiera brillar en este II Congreso Europeo. 

Oscar Pérez–Muga, Cristina Villalba, Stefan Vanistendael y yo misma (Gloria Gil) en la recepción celebrada en el Ayuntamiento de Bilbao.